La regla dice que cuando lees un libro por obligación no lo disfrutas tanto, pues Kitchen por Banana Yoshimoto fue capaz de romper esa regla y me alegra eso, mucho. Dos relatos cortos donde la muerte, la soledad, el amor y la superación están latentes y te dejan taciturno y pensativo.
Título: Kitchen (キッチン)
Formato: Tapa rústica
Número páginas: 206
Editorial: Tusquets
Sinopsis: Cuando la jovencísima Mikage se queda sola a la muerte de su abuela, se refugia en la cocina de su vasta casa. Un día, sin embargo, un amable muchacho llama a su puerta y le propone que vaya a vivir con él y con su madre, Eriko. Sin embargo, esta hermosa y acogedora mujer no es quien parece ser. Una fábula en la que la soledad y la aridez emocional quedan mitigadas por la inmensa sabiduría de otro mundo ancestral.
KITCHEN
Yoshimoto nos introduce dentro del dolor y la soledad de Mikage, una joven japonesa a la que encontramos recostada en el suelo de su cocina, desencajada tras la muerte de su abuela, el último familiar que le queda. Cobra conciencia que está sola en el mundo y tiene que dejar el departamento donde vive, pero está envuelta en sus monólogo interiores que pensar en eso es lo último que quiere hacer.
La muerte tiene un peso demasiado grande y a nosotros, que somos jóvenes y no teníamos que conocerla, nos ha aplastado.
Un día, de la nada, aparece Yuichi, un joven que le ofrece a Mikage venirse a vivir a su casa junto a su madre Eriko, el padre trans-género de Yuichi dueña de un bar gay. Yuichi le cuenta que él conoció a su abuela y le tenía mucho aprecio y por eso ahora que ya no está puede imaginarse lo sola que se puede sentir. Para no ser descortés Mikage acepta la invitación de ir a su casa pero sin la intención de quedarse. Lo que Mikage no sabía es que quedará envuelta por la familia que lo acoge.
“Al tener a alguien cerca, la soledad es más cruel.”
Lo que ella pensó que sería un día pasaron a ser meses. En los cuales no solo hace mención de una variedad de platos japones y lo mucho que le gustaba la cocina de su nuevo hogar, si no que entabla una relación fuerte con Eriko y Yuichi. Meses en los cuales Yoshimoto desarrolla sentimientos como soledad, el amor, la familia y la amistad.
La novela corta de Banana está marcada por la muerte, por despedidas definitivas y el amor que uno no va dejar de sentir nunca por alguien a pesar que no este presente. Es una de esas novelas que cuando acabas te deja confundido y con un vacío existencial.
MOONLIGHT SHADOW
Esta mística novela corta está incluida en la edición Tusquets, Banana Yoshimoto la escribió con la finalidad de esclarecer su tesis de licenciatura y llegó a ganar dos premios literarios japoneses el Kaien (1987) y el Izumi Kyoka (1988).
Una vez más la muerte es la responsable del estado mental del personaje principal. Esta vez tenemos Satsuki quien acaba de perder a su novio, Hitoshi, quién murió en un accidente de tráfico junto a la novia de su hermano menor, Hiiragi.
Satsuki, hace joggin por la mañanas con la finalidad de poder disipar su mente y menguar el dolor. En una de sus rutinas es donde conoce a una misteriosa mujer que de alguna manera intenta ayudarla a superar la muerte de Hitoshi.
Esta historia está cargada de misticismos y símbolos. Dando un reflejo de las creencias japonesas, lo que lo hace extra especial porque tendremos la oportunidad de conocer un poco más sobre la cultura del país nipón.
Un historia marcada por el dolor de la pérdida, el desconcierto, los recuerdos del amor y la superación. Demostrando lo mucho que altera en nosotros la muerta ajena y que solo nos queda conformarnos con nuestro nuevo yo y seguir adelante.